Luis Susanibar Napuri - Doctoralia.pe

Glándulas de Tyson

Muchos varones poseen en el canal del pene (surco balano prepucial) o en la corona del glande, unas pápulas blanquecinas o amarillentas, que suponen gran preocupación por parte de nuestros lectores.
Estas tumoraciones, generalmente son benignas y corresponden a las denominadas Glándulas de Tyson.
Ampliamos la información al respecto.
 
Pene perlado
Las Glándulas de Tyson son pequeñas tumoraciones miliares (puntiformes) que están lozalizadas en el surco balano prepucial o en la corona del glande de muchos varones. Se les aprecia organizadas en forma circunferencial, pudiendo tener una o dos filas.
Muchas personas asumen erróneamente que se trata algún tipo de enfermedad de contacto sexual, y muchos profesionales pueden incluso llegar a confundirlas con verruga genital.
Cómo vimos en nuestra anterior publicación, estas glándulas de aspecto perlado son rezagos anatómicos evolutivos, y no tienen potencial malignizante. Tampoco se contraen ni contagian durante el acto sexual.

Glándulas de Tyson y Circunsición
Estas glándulas son mas evidentes en las personas no circunsidadas.
En nuestra experiencia, las glándulas de Tyson tienden a desaparecer en los varones que han sido sometidos a cirugía de postectomía (término médico de la circunsición).
Si bien no se sabe exactamente la causa de su presencia, se supone que sus secreciones forman parte importante del esmegma, lo que le daría características antibacterianas y protectoras de la piel.

Epidemiología
La incidencia de estas glándulas es variable, las diversas series indicn que se manifiestan entre un 10 a 50% de varones a nivel mundial, existiendo predominancia en los no circunsidados.
Son mas comunes entre los 20 y 30 años de edad, pudiendo manifestarse inclusive en la adultez mayor.
En varones no circunsidados están presentes en un 22% frente a un 12% de aquellos circunsidades.
No existe ninguna distribución geográfica predominante. Algunos autores señalan que son mas comunes en afro-americanos

Tratamiento
Al ser de condición benigna, no es necesario su tratamiento. Sin embargo en caso de hipertrofiarse puede estar indicada su excéresis.
La circunsición, en aquellos varones sexualmente activos, puede ser una solución no sólo al problema de las glándulas, sino también como medida de prevención de enfermedades de transmisión sexual.

Dr. Luis Susaníbar Napurí
Urología Peruana. Especialistas con certificación internacional.
Av. Brasil 935-B. Jesús María.
Teléfonos: 3324 009 y 783 4200.

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